Todo aquel que descubre el País vasco por primera vez se sorprende del verdor del paisaje. Ya sea en el interior o en la costa, el País vasco es a menudo regado por una lluvia que es beneficiosa para el deleite de sus retinas.
Verde, rojo y azul son los colores del País vasco : verde por la naturaleza, rojo por la guindilla de Espelette y azul por el océano que lo baña. Colores que además caracterizan blas fachadas de sus edificios.
La Soule es la provincia más interior : su capital, Mauléon es la tierra de la pelota vasca, del rugby y de la alpargata vasca.
La Baja Navarra, cuya capital es Saint-Jean Pied de Port, está en el camino de Santiago y es la zona de los famosos vinos de Irouleguy.
En cuanto al Labourd,cuya capital es Bayonne, incluye toda la costa atlántica con las espectaculares ciudades de Biarritz, San Juan de Luz y Hendaya. En el interior, encontramos Espelette, Ainhoa, Sare o Ascain.
Durante sus visitas, les propondremos descubrir estos y más magníficos lugares. Comer unas ostras en el puerto viejo de Biarritz, descubrir el mercado de Espelette y sus casas decoradas con guindillas, visitar la casa de Edmond Rostand en Cambo o terminar un dia en la playa en Hendaya con unos sabrosos pintxos.
Los aficionados al golf descubrirán algunos de los mejores campos de Francia con hoyos entre mar y montañas.
Las fiestas locales también son muy famosas como la Feria de Bayona, de obligatoria asistencia.
En verano, como la costa se abarrota rápidamente, les propondremos maravillosas estancias en el interior, una maravillosa mezcla de autenticidad y tranquilidad.
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